Roberta Zambrano, la Elsa Bucaram de 2025

Roberta Zambrano y Daniel Noboa

Ya no son cartones, sino muñecos de Daniel Noboa. Estos juguetes repartió la prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano, en un claro evento de campaña. El CNE, el Gobierno y la Contraloría guardan silencio.

Roberta Zambrano y Daniel Noboa
La prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano junto al presidente Daniel Noboa.

La campaña ya empezó y por ende las violaciones al Código de la Democracia por parte del oficialismo. No solo que la Asamblea está en una vacancia de facto, sino prefectos y legisladores están dispuestos a todo para ganar el próximo 16 de noviembre.

El hecho obsceno de la campaña, que está empezando, lo protagonizó la prefecta de Esmeraldas, Roberta Zambrano.

Durante el feriado, ella encabezó un mitin político en su provincia lo que era un claro evento de campaña. Aunque ella no pidió licencia.

Vestida de morado, Zambrano contó una conversación que tuvo con el presidente Daniel Noboa. A él le contó de que iba a tener este evento y lo invitó.

También le pidió si podía ayudar con algo. Y Noboa contestó enviando 2.000 muñecos tipo Ken de él.

Ya no hay cartones. Estos han sido reemplazados por muñecos de Noboa que vienen bien para la Navidad que él adelantó.

Así Zambrano se zambulló en la más cruel utilización de la pobreza. Un video publicado en su cuenta de Tiktok muestra la repartición a ritmo de reguetón.

La imagen recuerda a Elsa Bucaram, la tristemente célebre alcaldesa de Guayaquil de los 80. Ella se hizo famosa por lanzas muñecas desde el balcón del Municipio.

Otra vez la instrumentalización de la pobreza. Aquel acto ocasionó una estampida humana de madres y niños desesperados por un juguete.

Después de todo tiene sentido. Los Noboa son los hijos políticos de los Bucaram. Y Roberta Zambrano es fiel empleada de esta nueva dinastía.

Zambrano, como Elsa, se ha hecho famosa por su estilo vulgar. Grita, amenaza a periodistas e insulta con los epítetos más bajos del vocabulario. Para ello recurre al machismo y homofobia.

La única diferencia entre Elsa y Roberta es que la primera siempre fue fiel a su partido. La segunda nació con los PSC, a los que ahora desprecia.

Ni José Serrano, el más respetado asambleísta del PSC, se salvó de sus insultos. Así Zambrano está metida de cuerpo entero en la campaña. Repartirá juguetes, bonos, insultará, gritará y más a lo largo de esta semana y media. Todo ello mientras su provincia se hunde en la más terrible de las pobrezas.

Y eso ocurre, el abierto uso de recursos públicos, ante la vista y paciencia del CNE, del Gobierno y de la Contraloría. Todas estas entidades que deberían hacer respetar la ley, pero que ahora han renunciado a sus funciones para trabajar a favor de los deseos de la familia Noboa.

Más de 80 empresas se suman a la campaña de Noboa de adelantar el décimo

Ivonne Núñez

El sector privado, incluido el banco de Guillermo Lasso, pliega a la medida adoptada por el Gobierno que tiene claros objetivos electorales.

Ivonne Núñez
La ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, con un representante de Almacenes Pycca.

Los empresarios ya tomaron partido en la consulta popular del próximo 16 de noviembre de 2025. Ese día los ecuatorianos decidirán si se convoca a una Asamblea Constituyente que se realizará bajo los deseos del presidente Daniel Noboa.

La ministra de Trabajo, Ivonne Núñez, ofreció una entrevista a Teleamazonas. Allí dijo que hasta este jueves 30 de octubre de 2025, 83 empresas privadas se adhirieron a la medida dispuesta por Noboa.

Se trata del adelanto del décimo tercer sueldo, conocido como bono navideño. Esta aguinaldo, normalmente, se paga hasta el 24 de diciembre de cada año.

Pero en esta ocasión se trastocó. Noboa ordenó que se pague de manera obligatoria en el sector público hasta el próximo 15 de noviembre, un día antes de la consulta.

Claramente se trata de una medida electoral, muy fiel a la política de los Noboa. Si Álvaro Noboa regala mercadería en sus campañas electorales; su hijo, el hoy presidente Daniel Noboa, despilfarra recursos que no son de él.

La excusa es la «reactivación económica» y que los empleados públicos puedan disfrutar del «black friday». Una tomadura de pelo para cualquier ecuatoriano que sabe que las rebajas, al menos en el país, no son la gran cosa.

Núñez tuve la audacia de decir que el bono navideño ya no es tal desde 2015 cuando se dio la posibilidad de mensualizarlo. Lo que no dijo fue que esa posibilidad es opcional. Mientras que lo de Noboa es obligatorio.

Para el sector privado Noboa dejó el adelanto opcional. Pero a inicios la semana pasada mostró las ganancias extraordinarias de la banca y pidió que se sumen a su medida, que se enmarca en la campaña electoral.

Banco Guayaquil, de propiedad del fracasado expresidente Guillermo Lasso, contestó afirmativamente. La cuenta oficial de la entidad bancaria informó en X que pagaría a sus empleados el décimo tercero el próximo 15 de noviembre.

Que quede registrado en la historia que los bancos sí juegan un rol político. Abren la mano, solo cuando tienen intereses. Si es para impulsar la economía con créditos, eso no.

Ahora la pregunta es cual es el objetivo del empresariado ecuatoriano para apoyar el salto al vacío que propone Noboa.

Muy probablemente es que se están frotando las manos. Saben que tienen a la vuelta de la esquina el fin de la jubilación patronal, la indemnización por despido, la obligatoriedad de la afiliación al IESS, el salario mínimo, el pago de impuestos, las cuotas mínimas de contratar a personas con discapacidad y más.

Por primera vez es realizable el país que siempre soñaron, uno donde la explotación se la ley, lo que les permitirá acumular riquezas sin límites. Por eso están dispuestos a adelantar el décimo, no porque les interesa la economía o sus trabajadores, sino porque lo consideran un último esfuerzo antes de la meta.

Gobierno repartió durante la campaña medio millón de bienes valorados en USD 12,5 millones

Zaida Rovira y Harold Burbano

El asambleísta Luis Fernando Molina reveló, tras un proceso de fiscalización, que el Ministerio de Desarrollo Urbano repartió 23 matutes durante la pasada campaña electoral.

Zaida Rovira y Harold Burbano
Zaida Rovira y Harold Burbano estaban al frente del entonces Ministerio de Inclusión Económica y Social durante la pasada campaña electoral.

La impunidad con la que se mueve el régimen de Daniel Noboa no deja de sorprender. Ahora el asambleísta de la RC, Luis Fernando Molina, reveló el reparto de bienes, supuestamente decomisados por la aduana, durante la pasada campaña electoral.

Luego de un proceso de fiscalización, Molina ofreció este miércoles 29 de octubre de 2025 una rueda de prensa en el vestíbulo de la Asamblea Nacional.

Allí informó que, entre enero y abril de este año, cuando Noboa buscaba la reelección, el Ministerio de Desarrollo Humano (antes MIES) repartió 23 matutes que contenían medio millón de artículos. Esa mercadería está valorada en 12,5 millones de dólares.

¿Qué es un matute? Es el nombre coloquial para referirse a mercadería importada de contrabando.

Durante la campaña se anunció que esos bienes, que supuestamente estaban abandonadas en las bodegas de la aduana, se repartirían entre ecuatorianos en condición de vulnerabilidad.

Molina encontró que eso fue mentira. No se trataron de bienes abandonados, sino que el entonces viceministro Harold Burbano (hoy ministro) pidió que se le entreguen los bienes.

Eso se repartió a diestra y siniestra durante la campaña sin ningún criterio técnico. No hay informes, ni seguimiento, nada. El Ministerio respondió a los pedidos de información que las entregas fueron generales y no a grupos específicos.  Y que el objetivo era mejorar la calidad de vida de los beneficiarios.

La generosidad solo duró durante la campaña. Una vez que Noboa resultó reelecto, la “política” se terminó.

Burbano guarda silencio, al igual que el Consejo Nacional Electoral (CNE). El mismo CNE que está persiguiendo a organizaciones porque supuestamente no presentaron balances financieros no dice nada frente a esta flagrante violación a la ley.

Constituyente de Noboa planteará la eliminación de los servicios de salud del IESS

Édgar Lama, presidente del Consejo Directivo del IESS.

El presidente Daniel Noboa ha sido claro: de ganar el sí en la consulta popular, la futura Constituyente eliminará las prestaciones de salud que actualmente brinda el IESS. Eso significa que afiliados y jubilados se atenderán en hospitales del Ministerio de Salud.

Édgar Lama, presidente del Consejo Directivo del IESS.
Édgar Lama, presidente del Consejo Directivo del IESS, durante una visita a un hospital de esta insitución.

Daniel Noboa ya está en campaña. Una muestra de ello es que está ofreciendo entrevistas, algo extraño en un presidente que se caracteriza por sus silencios.

Por supuesto, las entrevistas se ofrecen a medios afines que le permiten mentir abiertamente o le hacen sentir seguro de que no habrá preguntas difíciles.

Así Noboa fue a Radio Centro, recientemente adquirido por el asambleísta de ADN, Luis Alvarado. Allí el entrevistador le preguntó a Noboa sobre el IESS, en referencia a declaraciones que dio la semana pasada sobre su propuesta de eliminar las prestaciones de salud.

Noboa lo ratificó. Que en su Constituyente los servicios de salud del IESS pasarán a manos del Ministerio de Salud Pública.

Es decir que, en el Ecuador de Daniel Noboa que está en construcción, usted, afiliado o jubilado, tendrá que atenderse bajo los servicios del MSP.

Sí, en ese mismo MSP que atraviesa una crisis sin precedente que el Gobierno se niega a reconocer.

Los afiliados y jubilados tendrán que enfrentar el desabastecimiento de medicinas y de servicios. En los hospitales del MSP suele no haber servicios de guardianía o limpieza porque no se paga a los proveedores.

Estos vacíos suelen ser llenados por los familiares de los pacientes, que deben turnarse para mantener limpio el lugar donde se recuperan los enfermos.

Y a eso se suma que estas condiciones generan la proliferación de bacterias que suelen ser mortales para los enfermos. Eso lo saben los neonatos fallecidos en el Hospital Universitario de Guayaquil.

Ese es el futuro que le espera a los jubilados y afiliados al IESS. Es iluso creer que se reducirá el aporte al Seguro Social. El valor se mantendrá; lo que se reducirán son sus derechos.

Eso es lo que está en juego el próximo 16 de noviembre. Está todo claro. De ganar el sí, los servicios de salud del IESS desaparecerán. ¿Avalará eso la clase trabajadora ecuatoriana? Si la respuesta es sí, cualquier protesta futura carecerá de legitimidad.

Noboa bajará el diésel y presentará sus propuestas de Constitución… después de la consulta

Daniel Noboa

El presidente Daniel Noboa anunció que el precio del diésel bajará dos centavos el galón a partir del 15 de diciembre, un mes después de la consulta popular en la que los ecuatorianos deberán decidir si se convoca una Asamblea Constituyente.

El presidente Daniel Noboa no podía ser más obvio en la visión que tiene sobre la sociedad ecuatoriana. Para él, las personas que viven en este país son una especie de enajenados, con poca inteligencia, incapaces de comprender una mentira.

Así quedó evidenciado en dos anuncios que hizo Noboa. El primero sobre el precio del diésel. Según él, el costo del galón de este combustible bajará a USD 2.78, es decir dos centavos menos, a partir del próximo 15 de diciembre.

La reducción no será ahora, sino un mes después de la consulta popular en la que los ecuatorianos decidirán si se instala una Asamblea Constituyente.

Y hay más. El precio del diésel volverá a bajar. Esta vez hasta USD 2.70 a partir del 15 de febrero de 2026, cuando, según los cálculos, el país esté a las puertas de elegir constituyentes, siempre que se apruebe la consulta previa.

Cabe entonces preguntar, ¿por qué no lo rebaja ahora y por qué no negoció sobre este margen con la Conaie para evitar así más de 30 días de paro?

Porque el régimen no gobierna con base al bienestar general, sino fundamentado en cálculos electorales. Todo está enfocado en ganar la próxima elección.

Así, elimino bonos cuando gana una elección y los reanuda en la víspera de una campaña electoral. Adelanta el décimo tercero días antes de los comicios. Propone rebaja de combustibles basado en el mismo calendario.

Justamente por eso es que nada funciona en el país. Por eso es que los hospitales son casas de la muerte y la inseguridad campea. Porque los recursos se inyectan para satisfacer las apetencias electorales de los Noboa, no para cubrir los derechos de los ecuatorianos.

La rebaja de los precios de los combustibles lleva a otra pregunta: ¿Entonces, para que eliminó el subsidio si lo va a retomar en diciembre? ¿Acaso no decían los chearleaders del Gobierno que el subsidio beneficia a los traficantes de drogas, de combustible y la minería ilegal?

Es que era obvio, todos esos argumentos son falsos. Simplemente dejaron de cubrir el subsidio para redireccionar esos recursos a medidas tipo bonos que le permitan a Noboa ganar la próxima elección.

Y como parte de ese cálculo se evidencia una estrategia gubernamental: mentir. Sí, porque Noboa cuando oculta sus propuestas de Constitución, está mintiendo.

Es muy obvio que Noboa tiene en mente, con el cambio constitucional, bajarse derechos como la educación superior gratuita, la protección de la naturaleza y de los sectores estratégicos, la eliminación de la tercerización, la universalidad del derecho a la salud, el principio de no discriminación a todo tipo de minorías y más.

Noboa no lo puede decir porque sabe que perdería votos por lo que opta por la mentira. Ahora la pregunta es: volverá el pueblo ecuatoriano dejarse mentir otra vez. Porque si gana el sí, es muy evidente que esa será la política y otro paquetazo más.

Daniel Noboa desata una guerra sucia contra el pueblo ecuatoriano

Despliegue de la fuerza pública

La salvaje represión contra las comunidades de Imbabura o de San Vicente del Común ha sido calificada por la Conaie como “guerra sucia”. La imagen de la fuerza pública ante la comunidad se destruye.

Durante este feriado la represión se intensificó más, alcanzando cotas de salvajismo. Es tal el grado de violencia que usa la fuerza pública que la Confederación de Nacionalidad Indígenas del Ecuador ya habla de una “guerra sucia”.

La noche del jueves 9 de octubre, mientras Guayaquil celebraba un aniversario de independencia, los vecinos de San Vicente del Común (Quito) vivían una noche de infierno.

Imágenes difundidas en redes sociales muestran a policías lanzando bombas de humo en medio de callejones estrechos. De fondo se escuchan los gritos de mujeres suplicando “ya no más, ya no más, hay niños, mujeres, ancianos”.

Los policías ignoraron los pedidos de la gente que juraron proteger y continuaron con el sadismo. Otro video muestra la presencia de policías infiltrados encapuchados, simulando ser vándalos.

A ellos mismo la policía los observa y los escolta. Tan evidente esta estrategia propia de las guerras sucias, que la Policía tuvo que emitir un comunicado. Allí señala que los encapuchados eran miembros de la policía judicial que estaban cumpliendo allanamientos con orden judicial.

¿Y por qué, si tienen autorización judicial, deben cubrir sus rostros y no portar uniforme? A otros con esas mentiras.

En Imbabura también se reportaron manifestaciones a lo largo de este asueto. La fuerza pública respondió con la misma salvaje represión.

Por si fuera poco, el Gobierno realizó una morbosa exhibición de fuerza al llevar más de 5.000 militares hasta Quito, supuestamente para defender la ciudad.

Los medios publicaron las fotos de los uniformados saliendo de aviones, que acababan de aterrizar en el aeropuerto Mariscal Sucre.

Este 12 de octubre, cuando se conmemora la resistencia del movimiento indígena, se convocó otra gran manifestación en Quito. Hay tanquetas en las plazas del centro histórico de la capital y hasta en el tradicional barrio de Villaflora.

Un despliegue que ofende a aquellas zonas del país, especialmente de la Costa, tomadas por grupos delincuenciales. Los que viven allí están solos, en la indefensión porque las armas del Estado se usan para reprimir a sus hermanos, en lugar de defenderlos frente a los criminales.

La gran obra de Noboa, hasta ahora, es la destrucción de la imagen de la Policía, pero especialmente de las Fuerzas Armadas.

El pueblo ecuatoriano siempre tuvo una especial confianza en sus soldados, porque ganaron la Guerra del Cenepa, y porque, cuando encabezaron una dictadura militar, en los 70, nunca alcanzaron los niveles de salvajismo que sus colegas del Cono Sur.

Pero también porque en las manifestaciones que derrocaron a Bucaram, Mahuad y Gutiérrez, jamás abrieron fuego contra el pueblo. De hecho, cuando les dieron esa orden se rehusaron.

Pero en la memoria del país está el video de militares pateando el cadáver de Efraín Fuerez y el único compañero que se quedó junto a él.

Están las imágenes de policías gaseando periodistas o a manifestantes esposados. Están las imágenes de policías golpeando y deteniendo ancianas indígenas.

Este paro, deja como primer resultado, el derrumbe total de sus fuerzas de seguridad. Policía y militares ya tenían problemas por la infiltración del crimen organizado, pero se creía que aún eran casos focalizados.

Lo de ahora en cambio es desolador. Policías y militares se prestan para todo, incluso para cumplir los sueños húmedos y sádicos de un nño malcriado millonario, devenido en presidente. Están actuando por fuera de la ley, violando todas las garantías constitucionales y derechos.

Están siguiendo las órdenes de un personaje que no lleva la Patria en el corazón, que no tiene nociones de ecuatorianidad, no conoce su historia, no ama sus costumbres ni sus lugares. Es un extranjero que está usando a la fuerza pública para aplastar al pueblo que se siente traicionado.

La gente, cuando ve militares o policías, ya no se siente segura. Todo lo contrario, siente miedo por su actuación mafiosa. Si siguen ese rumbo, la caída del Estado ecuatoriano será total, puesto que, como Haití, se habrá quedado sin fuerza pública, al menos una de verdad.

La realidad se impone y se desmonta el supuesto atentado contra Noboa

Daniel Noboa

La propia Policía confirmó que no había impacto de balas en el vehículo de Noboa. La presidente de México, Claudia Sheinbaum, lo dejó claro: no hubo atentado, si no piedrazos.

Daniel Noboa
El presidente Daniel Noboa junto al vehículo apedreado en Cañar.

Ni 24 horas duró el nuevo cuento que trató de imponer el gobierno de Daniel Noboa en la sociedad ecuatoriana. La narrativa fallida era que el presidente sufrió un intento de magnicidio.

La historia comenzó este 7 de octubre de 2025 en Cañar, hasta donde se desplazó el Mandatario. La provincia fue la última en sumarse al paro convocado por la Conaie. Por eso el pueblo cañari estaba en pie de lucha.

Hasta allá fue Noboa. En ese marco, cuando la caravana presidencial se desplazaba atravesó una zona donde estaban manifestantes. Ellos, al ver al hombre que había ordenado una salvaje represión contra sus hermanos (hay que ver el video de la Policía deteniendo a una abuela), reaccionaron lanzando piedras.

Los parabrisas y ventanas de los vehículos blindados quedaron rotos, incluido el 4×4 que llevaba a Noboa. Todo fue grabado en video que se viralizó en redes sociales.

Así quedó listo el show y el Gobierno se puso manos a la obra. Denunciaron intento de magnicidio. Inés Manzano, la todopoderosa ministra de Energía y Ambiente, fue actriz principal. Ella acudió a la Fiscalía a denunciar el supuesto intento de asesinato.

Al terminar la diligencia, habló a los medios. Allí alabó la firmeza y valentía de su jefe. Y dijo algo clave que después sirvió para desmontar la mentira: que el vehículo presidencial tenía impactos de bala.

Eso sirvió de insumo para que medios internacionales titularan “atentado contra Noboa”. La noticia se regó como pólvora aquí y en el extranjero. Eso contribuyó para que el paro no sea protagonista, si no la violencia.

Pero hoy el panorama se aclaró. La propia Policía, la que ha reprimido a sangre y fuego las manifestaciones, reconoció que no había impactos de bala.

Posteriormente los analistas se preguntaron cómo así la caravana presidencial, que cuenta con avanzada, justo pasó por donde había una manifestación. Cómo así se cayó en ese craso error.

Luego, en su tradicional mañanera, la presidenta de México, Claudia Sheinbaum, quitó hierro al asunto. No fue atentado, sino que apedrearon al vehículo de Noboa. Eso es importante, aclaró ella, porque la palabra atentado conlleva armas de fuego que no hubo.

Después empezó a circular en redes un video en el que supuestamente se asegura que Noboa nunca estuvo en el vehículo. El Gobierno aún no niega esa versión, por lo que la duda se sembró.

La cereza del pastel vino desde Cuenca, donde permanecían los cinco detenidos. Resulta que el fiscal nunca presentó cargos, por lo que la jueza los dejó libres.

Así terminaron las 24 horas de show del supuesto atentado contra Noboa. Todo fue un montaje con el objetivo de victimizar al Presidente, y ganar adeptos en su enfrentamiento con la Conaie y de cara a la consulta popular.

Pero, los ecuatorianos que llevan padeciendo dos años de “noboismo”, el cuento ya no se vende tan fácil. El show, arma número uno del Gobierno, empieza a perder eficacia.

Daniel Noboa imita a Nicolás Maduro y adelanta la Navidad

Daniel Noboa

El presidente de Ecuador, Daniel Noboa, anunció que pagará el décimo tercer sueldo (el aguinaldo navideño) en noviembre a los funcionarios públicos.

Daniel Noboa
El presidente Daniel Noboa durante un evento en Quito este 5 de octubre de 2025.

Cada día que pasa el presidente Daniel Noboa se parece más a su par de Venezuela, Nicolás Maduro. Ambos resultaron ganadores de unas elecciones cuestionadas en las que la oposición no reconoció su victoria.

Maduro, cuando estaba cercado por las protestas, convocó a una Asamblea Constituyente. Lo mismo hace Noboa en pleno paro convocado por la Conaie.

Ambos usan la justicia para perseguir a sus detractores y reprimen de manera violenta las protestas.

Pero este domingo 5 de octubre de 2025 se sumó una similitud más. Maduro lleva dos años consecutivos “adelantando la Navidad”, que en Venezuela inicia el 1 de octubre.

Resulta que Noboa hizo algo parecido. En un mensaje publicado en X (ahí es donde se comunica con la población pues no ofrece cadenas nacionales), anunció que el décimo tercer sueldo se pagará en noviembre en el sector público.

Este aguinaldo navideño se paga, normalmente, hasta el 25 de diciembre, pero la tradición manda que se cancela hasta el día 15 de ese mes. Se trata de una conquista histórica de la clase trabajadora ecuatoriana.

Dice Noboa que la medida es para que los trabajadores públicos tengan recursos para disfrutar del “black Friday”, una fiesta consumista estadounidense que se popularizó en los últimos años en Ecuador.

Por eso, Noboa anima al sector privado a realizar lo mismo. Lo cierto es que las palabras de Noboa quedan en el aire porque hay algo más de fondo.

El 16 de noviembre es la consulta popular en la que Noboa se lo juega todo. Por eso está despilfarrando los recursos públicos en bonos de todo tipo.

El adelanto del décimo se circunscribe en esa política clientelar. El Gobierno quiere animar a la población, con dinero en mano, para que vote sí en la consulta.

Parece una medida desesperada, justamente como la de Maduro. La protesta de la Conaie, lejos de menguar, aumenta. Y ya se siente en la calle la carestía de la vida producto de la eliminación del subsidio al diésel.

Eso sin contar que la crisis en el sistema de salud pública sigue, al igual que la ola de inseguridad que se sufre con más crudeza en la Costa.

Esas crisis en simultáneo general malestar que se traduce en una paulatina reducción de la popularidad de Noboa. Por eso no queda más que adelantar el décimo.

La gran pregunta es: ¿servirá eso para engañar al pueblo ecuatoriano?