Harold Burbano se estrena en el Ministerio de Trabajo con ilegalidades

Harold Burbano

El flamante ministro de Trabajo, Harold Burbano, presionó al director regional de Trabajo de Quito para que borre el impedimento para ejercer funciones públicas de Álvaro Rosero, ministro de Gobierno designado.

Harold Burbano
El nuevo ministro de Trabajo, Harold Burbano, quien antes ocupó el Ministerio de Desarrollo Humano.

Un escándalo envuelve a la designación de Álvaro Rosero como ministro de Gobierno. No solo es por su perfil: un confeso odiador del movimiento indígena y de la Revolución Ciudadana.

Resulta que Rosero no puede posesionarse porque existe un bloqueo por parte del Ministerio de Trabajo para ocupar funciones públicas. La razón: tiene una deuda con el IESS de alrededor de USD 56.000.

En menos de 24 horas el Gobierno maniobró para eliminar el impedimento. Así, sin explicación alguna, la deuda pasó a la hermana de Rosero. Por eso, a esta hora, ya no existe impedimento para el dueño de Radio Democracia.

Pero en el interín ocurrieron cosas. Christian Marín, hasta ayer director regional de Trabajo de Quito, en su carta de renuncia denunció presiones del nuevo ministro de Trabajo, Harold Burbano, para borre el impedimento de Rosero.

Martín cuenta que Burbano entró a su oficina y le dio “tres minutos” para que borre el impedimento.

En una entrevista con Radio Pichincha, Martín cuenta que le explicó a Burbano y sus asesores que la orden era inviable porque borrar impedimentos requiere cumplir pasos que están reglamentados.

Martín señala que desde la mañana empezaron los hostigamientos y acosos del círculo de Burbano para que borre el impedimento.

Pero Martín no cedió porque de haber cumplido la orden hubiera cometido el delito de tráfico de influencias.

Burbano reaccionó en X. Dijo que despidió a Martín y puso la etiqueta de “falso” en la carta de renuncia de Martín.

Martin le responde con un lapidario mensaje: “Usted me presionó para que incumpla la ley y no cedí. Cómo hubiera hecho cualquier ecuatoriano.  Le doy un consejo, explíquele a la Fiscalía”.

Así Burbano va acumulando escándalos. En su paso por el Ministerio de Desarrollo Humano lideró el reparto de matutes durante la campaña electoral de la segunda vuelta del pasado abril.

Ahora como ministro de Trabajo, presiona para que subalternos violen la ley y así cumplir los deseos de su patrón, Daniel Noboa.

Gobierno repartió durante la campaña medio millón de bienes valorados en USD 12,5 millones

Zaida Rovira y Harold Burbano

El asambleísta Luis Fernando Molina reveló, tras un proceso de fiscalización, que el Ministerio de Desarrollo Urbano repartió 23 matutes durante la pasada campaña electoral.

Zaida Rovira y Harold Burbano
Zaida Rovira y Harold Burbano estaban al frente del entonces Ministerio de Inclusión Económica y Social durante la pasada campaña electoral.

La impunidad con la que se mueve el régimen de Daniel Noboa no deja de sorprender. Ahora el asambleísta de la RC, Luis Fernando Molina, reveló el reparto de bienes, supuestamente decomisados por la aduana, durante la pasada campaña electoral.

Luego de un proceso de fiscalización, Molina ofreció este miércoles 29 de octubre de 2025 una rueda de prensa en el vestíbulo de la Asamblea Nacional.

Allí informó que, entre enero y abril de este año, cuando Noboa buscaba la reelección, el Ministerio de Desarrollo Humano (antes MIES) repartió 23 matutes que contenían medio millón de artículos. Esa mercadería está valorada en 12,5 millones de dólares.

¿Qué es un matute? Es el nombre coloquial para referirse a mercadería importada de contrabando.

Durante la campaña se anunció que esos bienes, que supuestamente estaban abandonadas en las bodegas de la aduana, se repartirían entre ecuatorianos en condición de vulnerabilidad.

Molina encontró que eso fue mentira. No se trataron de bienes abandonados, sino que el entonces viceministro Harold Burbano (hoy ministro) pidió que se le entreguen los bienes.

Eso se repartió a diestra y siniestra durante la campaña sin ningún criterio técnico. No hay informes, ni seguimiento, nada. El Ministerio respondió a los pedidos de información que las entregas fueron generales y no a grupos específicos.  Y que el objetivo era mejorar la calidad de vida de los beneficiarios.

La generosidad solo duró durante la campaña. Una vez que Noboa resultó reelecto, la “política” se terminó.

Burbano guarda silencio, al igual que el Consejo Nacional Electoral (CNE). El mismo CNE que está persiguiendo a organizaciones porque supuestamente no presentaron balances financieros no dice nada frente a esta flagrante violación a la ley.